El Catálogo Colectivo reúne los registros del material que posee cada una de las
bibliotecas de la Universidad Nacional de Córdoba, pudiendo encontrarse colecciones
especializadas y actualizadas en todas las áreas del conocimiento; lo que permite una
amplia visibilidad y garantiza el acceso al patrimonio documental de la Universidad.
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No quisiera yo otra cosa, después de tanto hablar y escribir en vano, sino lo que reza el encabezamiento: orientar dentro de mis posibilidades, ciertamente escasas en mitad de la llanura, pero con serenidad y animo resuelto, a los hispanoamericanos que quieran ver y oír lo que ha ocurrido y sigue oc...
No quisiera yo otra cosa, después de tanto hablar y escribir en vano, sino lo que reza el encabezamiento: orientar dentro de mis posibilidades, ciertamente escasas en mitad de la llanura, pero con serenidad y animo resuelto, a los hispanoamericanos que quieran ver y oír lo que ha ocurrido y sigue ocurriendo en nuestra América. La ocasión es propicia, desde luego, ya que nuestra llamada diplomacia en conferencias interamericanas, en congresos de economistas, en tan numerosos convivios financieros como se han venido celebrando evade señalar concretamente Las causas de la pavorosa realidad política, social y económica de los pueblos latinoamericanos. Al señalarlas, una vez más, creo dar cima a mi labor incesante de varios lustros, con la esperanza de que vencidas dichas causas mejore nuestra situación. Por su actualidad, entonces, por su afinidad de tema, extraigo de mis originales lo que escribí hace veinte años y lo que he dado a la estampa en 1955. ¡La misma situación de coloniaje, exceptuando a dos o tres países hermanos! ¡Los mismos errores o debilidades! ¡Los mismos problemas, posiblemente empeorados, todavía sin resolver! A tal extremo que para muy dilectos amigos, en lugar de AMÉRICA HOY COMO AYER, este pequeño libro debió haberse intitulado AMÉRICA PEOR QUE AYER. Fuerte me pareció el título. Preferí dejarlo como está. Y aún le suprimí un segundo encabezado que decía entre admiraciones: ¡¡Y NO APRENDEMOS!! Porque estoy seguro, en mi optimismo, de que al fin y a la postre aprenderemos, de que vamos aprendiendo, por mucho que bien conocidos intereses se opongan al aprendizaje. Lo contrario sería negarle a nuestra América el sitio destacado a que tiene derecho, con inteligencia y honradez, en el concierto de las naciones libres. (fuente: nota del autor)
